Amorebieta-Etxano acogió el 17 y 18 de febrero, la competición de cubos de Rubik más grande de Euskal Herria. Alrededor de 150 participantes, nacionales e internacionales llegados de Euskadi, España, Francia, Alemania e incluso de Corea del Sur, mostraron sus habilidades con los cubos ante el público zornotzarra.
El Cubo de Rubik, creado por el arquitecto y profesor húngaro Ernő Rubik en 1974, ha cautivado a millones de personas en todo el mundo con su intrincado diseño y su capacidad para desafiar la mente humana. Este rompecabezas tridimensional, también conocido como Cubo Rubik o Cubo Mágico, se ha convertido en un icono cultural que trasciende fronteras y generaciones.
El Cubo de Rubik consta de seis caras, cada una formada por nueve cuadrados de un color específico. El objetivo del juego es lograr que cada cara del cubo esté compuesta por un solo color. A pesar de su aparente simplicidad, resolver el Cubo implica el dominio de algoritmos y la aplicación de estrategias específicas, lo que lo convierte en un desafío mental fascinante.
Entre los cubos más conocidos podemos encontrar al 3x3x3, también conocido como el cubo clásico y lo más común es tratar de resolverlo en el menor tiempo posible. En la categoría de One Hand (OH) los competidores tendrán el mismo objetivo que la categoría anterior, pero con la diferencia de que solo podrán usar una mano. Y también tenemos el Cubo a Ciegas (Blindfolded). En esta ocasión los concursantes intentarán resolver el 3x3x3 o 4x4x4 con los ojos vendados. En cuanto el juez levante el cubilete y deje a la vista la mezcla, el tiempo comenzará a correr hasta que el participante detenga el tiempo.
Sin importar la categoría, todas las personas presentes participaron simultáneamente haciéndose valer y mostrando sus habilidades, independientemente de su edad. Desde niños o niñas de 7 años, hasta un señor de 77. Sin duda alguna, una afición para todas las edades.
Durante los tres días de competición numerosos aficionados pudieron observar de cerca las distintas disciplinas y disfrutar de la habilidad y destreza de los participantes. El público local advertiría además las curiosas estampas que ofrece una competición de estas características: cientos de personas, competidores y aficionados con sus cubos en la mano, haciéndolos girar a toda velocidad, caras de concentración, auriculares que aíslan de la multitud, cronómetros que determinan la eficacia del resultado y bolsas de tela diseñadas para la ocasión, junto a galletas ofrecidas por el equipo organizador del evento.
Para coronar la competición, se proclamó el podio de la categoría reina: el 3x3x3. En tercera posición quedó Oliver Fritz, chico alemán que tuvo que marcharse justo antes de la entrega de premios. El segundo puesto fue para el ganador de la edición pasada del Amore Open, Quentin Revault, y finalmente, el primer puesto de este año fue concedido a Juliette Sébastien. Este último nombre no fue una sorpresa teniendo en cuenta que esta joven francesa, no solo tiene el récord nacional de su país natal, sino que está en el puesto 41 del ranking mundial.
Esta ha sido la segunda edición del Amore Open 2024, concurso organizado por el equipo de Amore Open respaldado por Asociación Española de Speedcubing (AES) y Euskalcubing, con la colaboración de Ametx y del Ayuntamiento de Amorebieta Etxano, además de la aportación de diversos patrocinadores locales. Eskerrik asko a tod@s.
