La Biblioteca Foral de Bizkaia expone la muestra ‘El Tranvía Eléctrico de Bilbao a Durango y Arratia. 50 años sin el Tranvía de Arratia’ hasta el próximo 29 de diciembre
La exposición itinerante está organizada por Zertu Kultur Elkartea, con el patrocinio de la Diputación Foral de Bizkaia, y se enmarca dentro de la celebración del quincuagésimo aniversario de su desaparición, con el fin de «dar a conocer la historia de aquel viejo medio de transporte».
La Biblioteca foral será «la última parada» de esta muestra, que se compone de unas 150 fotografías, gráficos, noticias de prensa, imágenes de cine —con grabaciones de Julián Elejoste, Felipe Manterola y del NODO—, diversos objetos relacionados con el Tranvía de Arratia y maquetas de tranvías tanto de viajeros como de mercancías.
Viajeros y mercancías
Los responsables forales han destacado que «adentrarse en la historia del tranvía eléctrico de Bilbao a Durango y Arratia supone remontarse a los últimos años del siglo XIX, allá por el año 1898». Comunicaba Amorebieta-Etxano, Durango y los pueblos del valle de Arratia entre sí y a estos con la comarca del Gran Bilbao. Durante sus más de 60 años de existencia, los raíles fueron interrumpidos en varios tramos. De este modo, durante la Guerra Civil quedó inutilizado el ramal entre Amorebieta y Durango y, una vez finalizada la contienda, «no fue reconstruido debido tanto a los destrozos sufridos en sus instalaciones como al poco interés de la Compañía de los Ferrocarriles Vascongados por mantener un trayecto que la empresa consideraba suficientemente cubierto por su servicio», han explicado.
En esta misma fecha se modificó la terminal en la capital vizcaína, con lo que pasó de la plaza del Arriaga a la parte posterior de este teatro. Pese a que el 27 de marzo de 1950, se suprimió el ramal entre Lemoa y Amorebieta, en 1952 el tranvía de Arratia alcanzó sus «máximos históricos» en ingresos y tráfico de viajeros, con 6.749.914 usuarios. En cambio, han indicado desde la Diputación, las mercancías manifestaban «una clara tendencia a la baja» a medida que proliferaban los servicios de transporte por carretera.
A partir de entonces, el tranvía de Arratia comenzó, en palabras de los responsables forales, «una lenta agonía» debido tanto a la constante reducción de viajeros, como a «los problemas que representaba su coexistencia con los automóviles». En este contexto, el 1 de agosto de 1956 se suprimió el tramo entre Galdakao (Plazakoetxe) y Lemoa, de tal forma que la línea quedó dividida en dos secciones incomunicadas entre sí. La primera de ellas unía Bilbao (Urazurrutia) y Galdakao (Plazakoetxe), mientras que la segunda conectaba Lemoa y Zeanuri. Dos años después, el 1 de octubre de 1958, se eliminaron el acceso al centro de Zeanuri y el tramo comprendido entre Urbi (Firestone) y Galdakao (Plazakoetxe). Aunque el 5 de diciembre de 1962 caducaba la concesión administrativa y estaba anunciada la fecha de su desaparición, el tranvía continuó circulando hasta noviembre de 1964, en espera de que se estableciera una línea de autobuses que lo sustituyera. Con el cierre de los dos últimos tramos que sobrevivieron hasta el último momento (los de Bilbao-Urbi y Lemoa-Zeanuri), el 30 de noviembre de 1964 desapareció definitivamente el tranvía de Arratia.