SOBRE RUEDAS! IÑAKI MICHELIN

Han pasado más de 50 años desde que un joven vecino de Galdakao (perdón, de Zabalea) decidiese ofrecer un servicio de neumáticos en Amorebieta. Sin una lata en el bolsillo, como le gusta decir a él, Iñaki, abrió un taller de ruedas con ayuda de su hermano José en el barrio de la Cordelería, junto al bar de Claudio. Pero los inicios no fueron nada fáciles. Hay que tener en cuenta que por aquel entonces en Amorebieta el número de vehículos no superaría la centena y que las grandes empresas como Izar o Forjas contarían con un único camión para todos sus portes. Durante esos primeros años, Iñaki hacía arreglos de lo más variopintos: poner parches a bolsas de agua caliente o a katiuskas y abarcas, o arreglar pinchazos de carretillas fueron sus primeros trabajos. Pero Iñaki confiaba en que el parque automovilístico fuese en aumento e invirtió todo su tiempo y esfuerzo en superar las dificultades iniciales. Y no se equivocaba. Efectivamente, poco a poco las familias zornotzarras fueron adquiriendo sus primeros coches en propiedad. Los más mayores aun recordarán aquellos primeros Seat 600. Y estas familias encontraron en el taller de Iñaki un aliado necesario para sus pinchazos y repuestos de neumáticos. Pero no solo los zornotzarras se fijaron en este joven vivaracho. La multinacional Michelin también puso sus ojos en él y le nombro agente oficial de la que era la primera marca mundial en neumáticos, pasando de ser Iñaki a secas a Iñaki Michelin para muchos zornotzarras. Y es que la marca francesa no escatimaba en publicidad y merchandaising por aquella época y no resultaba difícil ver gorras, camisetas, calendarios etc del muñeco gordito entre los vecinos de Amorebieta. Incluso hubo años que ayudaban a costear los actos de la fiesta de San Cristóbal, y mandaban disfraces del famoso muñeco, que los hermanos Izaguirre portaban con gran salero para disfrute sobre todo de los más pequeños.
Además de por dar un buen servicio, Iñaki se gano pronto la simpatía del pueblo gracias a su espíritu bromista, y su buen humor. Bastaba un “que tal el negocio Iñaki?” para que respondiese un “sobre ruedas!” de inmediato. Pero seguramente los más mayores del lugar recordarán con simpatía las bromas que le hacían al bueno de Claudio, entre las que destaca el famoso “Serrau por ir playa”, que le colocaron en la puerta del bar.
Han cambiado mucho las cosas desde entonces, pero Vulcanizados Iñaki sigue ofreciendo hoy en día un servicio de neumáticos en Amorebieta. Aunque Iñaki, el original, se ha acogido al merecido descanso que ofrece la jubilación, su hijo de mismo nombre (venia predestinado) mantiene el negocio junto a Izaskun, una de sus hijas. Vulcanizados Iñaki puede sentirse orgulloso de formar parte del selecto club de los 50, empresas con más de cincuenta años que han contribuido al crecimiento y al progreso de Amorebieta, y que han podido sobrevivir gracias a la fidelidad de sus vecinos.
Hoy, 50 años después, un gran grupo (Confort-Auto) ha vuelto a poner los ojos en Iñaki, esta vez hijo, para ofrecerle un respaldo que refuerce su negocio ante la feroz competencia de la globalización y los grandes espacios comerciales. De modo que, gracias a la experiencia en el trabajo y la cercanía en el trato, unido al respaldo de un gran grupo (lo que repercute sobre todo en precio final para el cliente), a Vulcanizados Iñaki le auguramos y deseamos 50 años más “sobre ruedas!”.

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