Al tratarse de una actividad esencial, los establecimientos de alimentación, (supermercados, pescaderías, carnicerías, panaderías…) siguen trabajando con el miedo a contraer el Covid-19 y la voluntad de servir a sus vecinos. Y es que no es para menos, estos trabajadores, en su mayoría mujeres, trabajan ocho horas con una mascarilla puesta, atienden a cientos de personas, les cobran, reponen las estanterías. El riesgo es evidente.
Al principio, no había control y los clientes se agolpaban, pero ahora se organizan filas, se entregan guantes y se ofrece gel desinfectante para las manos.
Las trabajadoras de Eroski Amorebieta han elaborado un vídeo, a través de varias fotografías, para dar las gracias por su paciencia a los vecinos de Amorebieta-Etxano, que tienen que soportar largas colas y respetar las distancias de seguridad. También quieren agradecer a los aitites y amamas por quedarse en casa, al tiempo que les dicen que les echan de menos.
En la tienda de BM quieren agradecer a una clienta su aportación gratuita de mascarillas y confirmar que seguirán atendiendo a su clientela con una sonrisa.
Eskerrik asko denoi bihotzez!!!
