El guipuzcoano se luce en solitario en el tramo final de la Klasika Primavera en Amorebieta. Éxito rotundo para Movistar Team al cierre de la gran semana que ha redondeado este domingo Gorka Izagirre en la 63ª Klasika Primavera de Amorebieta (171,5 km;), donde el guipuzcoano de Ormaiztegi se imponía en solitario para anotar el 18º éxito -con siete corredores distintos- de los de Eusebio Unzué en apenas tres meses.
Tras un buen trabajo de los Dayer Quintana, Moreno o Betancur en el control de la fuga inicial, Gorka se introducía en un corte de ocho hombres a partir del segundo de los tres ascensos a Muniketa / Montecalvo. El grupo jamás contó con más de 1’ sobre un pelotón donde Caja Rural y Sporting-Tavira perseguían, mientras Rojas, De La Parte o Jesús Herrada aguardaban su momento a la espera de una eventual neutralización.
Izagirre, experto sobre el terreno y 2º en este mismo escenario hace tres temporadas (repitió ese resultado en el doblete junto a su compañero Visconti en 2016), fraccionó la escapada con un rápido descenso final y peleó con éxito ante el resto de fugados por conservar una breve renta, no más de diez segundos, que finalmente le permitió alzar los brazos con comodidad. Un gesto que el vasco no lograba hacer desde hacía casi tres años, cuando venció -de nuevo ante sus paisanos- en la Prueba Villafranca de 2014.
Gorka Izagirre: “He sufrido mucho al final, creía que no llegaba. Ya era hora de ganar aquí después de dos segundos puestos. Aunque a algunos que tenemos cerca parece que les resulta sencillo, para el resto es muy difícil ganar. Yo llevaba tres años sin hacerlo y por eso este triunfo me llena de alegría. Con los líderes con los que afortunadamente contamos no tenemos muchas oportunidades, y estos días hay que aprovecharlos.
No tenía muy buenas sensaciones hoy. En la primera pasada de Muniketa no iba a gusto, pero luego con el paso de las vueltas vas entrando en carrera y una vez en la fuga me he encontrado muy bien. La escapada tenía buen nivel, con casi todos los equipos representados, y además sabía que por detrás venían compañeros como Víctor, Jesús o Rojas que podían ganar si nos cogían. Después de la última subida llevábamos muy poca diferencia, me he lanzado un poco para abajo y cuando he visto que tenía hueco ya no he mirado para atrás. La verdad es que ha sido una semana increíble para el equipo y esta es la mejor manera de cerrarla”.
