Muchos vecinos y vecinas de Amorebieta han salido hoy a la calle para mostrar su solidaridad con Haitz y denunciar el acoso que sufre este joven con discapacidad.
Amorebieta no acepta el bullying, hoy lo ha demostrado claramente. Una compañera de trabajo de Itxaso, la madre de Haitz, ha leído un comunicado para denunciar este acoso y reivindicar el derecho de todas las personas con discapacidad a vivir felices.